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  528. Martes, 19 Abril, 2005

 
Capítulo Quingentésimo vigésimo octavo: "El futuro es como el cielo: todo el mundo lo exalta, pero nadie quiere llegar a él todavía" James Arthur Baldwin, 1924-1987, escritor estadounidense)

El signo internacional "&", que equivale a la conjunción copulativa "y", y que los anglófonos (listos ellos), utilizan tan a menudo para evitarse el "and", se debe a un esclavo de Cicerón llamado Tirón.

Este "genio" inventó un sistema abreviado de escritura, (un antecedente de la taquigrafía) gracias al cual, y por el uso que hizo del mismo en el año 63 a.de C. en una sesión del SPQR tomando nota fiel de todo lo que expusieron los participantes, fue recompensado por su amo con la libertad.

Muestra evidente, una más, de lo conveniente que resulta para nosotros los vagos, una correcta "planificación" si queremos alcanzar objetivos, aunque esta "planificación" lleve consigo cierto trabajo añadido.

Y en esta línea hoy, y en una de las habituales exclusivas de "tantos hombres y tan poco tiempo", un truco para poder echar una cabezadita en el trabajo con el mínimo riesgo posible.

Cualquier avezado en el tema sabe que métodos hay muchos, desde fingir que uno está enfermo con el consiguiente y permitido amodorramiento, hasta colocarse unas gafas de sol con las que no se note mucho las veces que cerramos los ojos.

No obstante, ambos casos tienen el problema de llamar excesivamente la atención y además el de verse sometido a preguntas más o menos incomodas a las que encima habría que contestar, interrumpiendo así el sueño, algo muy poco útil para nuestro propósito.

Pero no hay que desanimarse: hay solución.

En los casos difíciles nada mejor que recurrir a la cosmética, así, como suena; bastará con tener un poco de maña para pintarse unos ojos abiertos (lo más reales posible eso sí) sobre los párpados para que por más cerrados que estén, cualquiera de los que nos rodeen se crean que están viendo los originales.

Dos precauciones importantes antes de poner el marcha el "experimento": primero cuidado con roncar, se notaría mucho, segundo y sobre todo, mucho cuidado a la hora de elegir a quien "mirarán" los "ojos" cuando nos durmamos, clavar la mirada demasiado tiempo en gente poco recomendable, puede traer malas, muy malas consecuencias.